El primer satélite canario, liderado por el Instituto de Astrofísica de Canarias (IAC), ALISIO-1 (que se corresponde con las siglas en inglés de Advanced Land-Imaging Satellite for Infrared Observations), fue lanzado al espacio el pasado 1 de diciembre desde Vandenberg, en California, y, en pocos meses, ha completado su fase de comisionado o verificación en órbita del correcto funcionamiento de todos sus sistemas.
En esta fase de verificación se ha realizado la calibración en órbita de la cámara DRAGO-2 y se han puesto a prueba todas las capacidades del satélite (suministro de potencia, ancho de banda de comunicación, capacidad de apuntado, etc.), incluyendo la obtención de una ráfaga de imágenes infrarrojas con modificación del apuntado que ha permitido generar un video de un objetivo fijo, en concreto se hizo la prueba con el volcán mexicano Popocatépetl, que empezó a exhalar humo y gas a mediados de febrero.
En esta erupción, el satélite canario ha logrado imágenes de alta calidad que permiten su uso tanto para gestionar la emergencia como para el seguimiento científico de este tipo de eventos, algo de especial relevancia para un archipiélago volcánico como el canario. Durante este comisionado, ALISIO-1 ha comenzado a realizar seguimiento de zonas afectadas por la sequía en el sur de la Península Ibérica o ha caracterizado la humedad relativa en algunas de las Islas Canarias.
ALISIO-1 es un satélite para la observación de la Tierra cuyo desarrollo ha sido liderado por el equipo de IACTEC-Espacio del Instituto de Astrofísica de Canarias y que dispone en su interior de dos instrumentos de última generación. El primero de ellos es DRAGO-2, que es la cámara espacial infrarroja más compacta que existe, en términos de peso, volumen y consumo energético, desarrollada íntegramente en IACTEC-Espacio. Por otro lado, es el primer satélite español que cuenta con un módulo de comunicaciones ópticas mediante láser que permite una mayor velocidad de transmisión de los datos a Tierra.
El investigador principal de este proyecto, Álex Oscoz, afirma que, tras finalizar la fase de comisionado, “hemos demostrado que ALISIO-1 representa una nueva era de instrumentos que permiten obtener gran precisión y calidad en sus resultados a un precio muy inferior y con un tamaño muy reducido, lo que sitúa al IAC como un centro tecnológico de excelencia muy competitivo a través, en este caso, de su división IACTEC-Espacio”.
Una vez terminada su fase de comisionado, ALISIO-1 comienza una nueva fase con el desarrollo completo de proyectos de monitorización de espacios tanto en las islas Canarias como en otras regiones del mundo. El equipo impulsor del proyecto ha podido observar, al menos, más de cien puntos a lo largo de todo el planeta en los que el satélite podría ser una herramienta eficaz de obtención de datos para el seguimiento y gestión de eventos de interés para la población.
Entre otras misiones, el satélite canario ALISIO-1 es útil para la elaboración de planes de prevención y actuación frente a catástrofes naturales, ya que hace posible la monitorización de incendios, inundaciones o erupciones volcánicas casi en tiempo real. A esto se suma su utilidad, por la precisión y calidad de sus imágenes, en cuestiones como los vertidos de hidrocarburos en el mar. Además, también está diseñado para el seguimiento de zonas en riesgo de desertificación y para el estudio de la evolución de cultivos.
El éxito de ALISIO-1 abre la posibilidad de disponer de una constelación de varios satélites con la misma tecnología que pueda proveer imágenes diariamente o, incluso, cada pocas horas, con lo que esto puede representar para el seguimiento de catástrofes naturales en las Islas Canarias o en otros lugares del mundo.
Al mismo tiempo, sienta las bases para otras misiones más complejas en las que el IAC ya está trabajando, como son VINIS, un nuevo instrumento para la vigilancia terrestre que observará en múltiples bandas de los espectros visible e infrarrojo con una resolución por debajo de los 5 metros por píxel, e IACSAT Astro-1, el primer telescopio espacial del IAC, que se utilizará para la confirmación de nuevos planetas de tipo terrestre fuera del Sistema Solar y para estudiar asteroides cercanos a la Tierra.
Para el desarrollo del satélite ALISIO-1, el IAC ha colaborado estrechamente con la empresa Open Cosmos, encargada tanto del diseño y fabricación de la plataforma satelital como de su comisionado y operación, cumpliendo en todo momento con los requisitos exigidos.
IACTEC-Espacio, es un programa integrado en IACTEC, el espacio de colaboración tecnológico y empresarial del IAC, que cuenta con el apoyo financiero –Programa de Capacitación, al amparo del Programa TFINNOVA, del Marco Estratégico de Desarrollo Insular (MEDI) y del Fondo de Desarrollo de Canarias–, y de infraestructuras (edificio IACTEC) del Cabildo Insular de Tenerife. IACTEC-Espacio está financiado por el Plan de Recuperación, Transformación y Resiliencia del Gobierno de España.