Esta plata y metales estaban distribuíos en 23 bolsas y sacos, así como en dos grandes embases, alcanzando un valor que rondaría los 400.000 euros.
Los agentes pudieron saber que esa plata la tenía el denunciante por su trabajo, y que la caja fuerte no había sido forzada, sino que la habían abierto utilizando uno de los dos juegos de llaves existentes.
A esas llaves solo podían tener acceso ciertos familiares del denunciante, averiguándose que el robo se había producido de madrugada por dos personas.
Esas indagaciones pusieron a los agentes sobre dos jóvenes pertenecientes a la familia del denunciante y que a su vez tenían acceso a las llaves de la caja fuerte.
Finalmente, la mañana del pasado 27 de agosto se procedió a investigar a estas dos personas como presuntos autores del robo. Con la colaboración de un tercer familiar se pudo recuperar la totalidad de la plata y otros efectos metálicos sustraídos, los cuales fueron trasladados a las dependencias de la Guardia Civil de Castro Urdiales.