Se trata del segundo medicamento más consumido en el país. Un fármaco que sirve para aliviar el dolor y la fiebre y que no necesita receta para su adquisición, lo que provoca en algunas personas, que tomen durante más días de lo necesario esta medicación.
Francia ha prohibido la publicidad del Ibuprofeno de 400 mg por el aumento para fomentar un mejor uso.