Miembros del SEPRONA realizaron el pasado 1 de octubre una inspección a una explotación ganadera de Quijas en Cantabria.
Al llegar allí, los agentes "observaron la presencia de un potro muerto fuera de la explotación" y mientras continuaban la inspección "encontraron un total de 32 caballos que presentaban delgadez, algunos de ellos extrema. Junto a estos caballos había también 9 terneros que compartían el habitáculo. Durante la inspección al recinto de los caballos observaron a uno postrado y en mal estado, muriendo en un corto espacio de tiempo", según informa la Guardia Civil de Cantabria en nota de prensa.
Pero no fue lo único que encontraron los agentes de la Guardia Civil de Torrelavega, ya que en la parte trasera de la cuadra localizaron "6 reses bovinas muertas en diferente estado de descomposición. En el mismo lugar, con los animales muertos, había otras 13 reses vivas, que presentaban delgadez. Al igual que pasó con los caballos, durante la inspección otra ternera falleció".
Durante la investigación realizada por los miembros del SEPRONA "tampoco se pudo verificar" que el dueño de la explotación "hubiera solicitado en algún servicio veterinario asistencia para los animales".
Decomiso de los animales
La protectora SOS Pitbull and Horses se ha hecho cargo de los 31 caballos que permanecen vivos, después de que se haya considerado que "los animales pudieran estar en un estado de abandono, con falta tanto de alimentación adecuada como de cuidados higiénicos".
Un hombre de 55 años investigado
Con todo, el pasado 5 de octubre comenzó la instrucción de diligencias en calidad de investigado al responsable del mantenimiento de los animales, como presunto autor de un delito de maltrato animal.