Laura estaba de servicio el pasado domingo cuando su patrulla recibió una llamada de apoyo para asistir a una mujer de 28 años con síntomas de hipotermia en la Bahía de Santander.
Como ha contado en las últimas horas la Policía Nacional, la mujer se encontraba en el mar, agarrada a una escalera vertical próxima al monumento a los Raqueros en la zona del Paseo Pereda de la capital.
Una actuación que “fue cuestión de segundos, la celeridad fue crucial”. Laura cuenta en ‘Más de Uno Cantabria’ que cuando su patrulla llegó al lugar la mujer “no quería ayuda de nadie, yo intenté que se relajara un poco y que quisiera mi ayuda”.
“Ella empezó a empatizar conmigo al ver que era una voz femenina”. A partir de ahí, Laura mantiene que “todo fue rápido, ni te paras a pensar”, aunque ahora “dos días después, lo recuerdo como algo muy notorio en mi carrera profesional”.