Así ha respondido Sáenz de Buruaga al ser cuestionada acerca del protagonismo que están adquiriendo estos tres exintegrantes de Cs en sus respectivas instituciones puesto que últimamente sus votos --el de Carrancio en el Parlamento y el de González y Vielva en el Ayuntamiento--están siendo, en muchos casos, decisivas para hacer prevalecer las posturas del Gobierno de Cantabria (PRC-PSOE) y del equipo de Gobierno de Santander (PP), ambos en minoría.
Al respecto, Sáenz de Buruaga ha opinado que son situaciones "un tanto diferentes" puesto que mientras el pacto transfuguismo tiene una traslación a las leyes en el ámbito municipal, en el Ayuntamiento, no ha ocurrido lo mismo en el autonómico, en el Parlamento.
La dirigente del PP ha afirmado que "lo que está ocurriendo en el Ayuntamiento de Santander es lo que las leyes dicen", que es que cuando un edil abandona la formación política con la que concurrió a las elecciones mantiene el acta pero pasa a ser concejal no adscrito.
Sáenz de Buruaga ha opinado que este cambio de consideración es "muy importante para desincentivar" este tipo de prácticas que, a su juicio, "hacen muchísimo daño a todo el sistema democrático", puesto que los concejales no adscritos "no tienen prácticamente ninguno de los derechos" que tiene el que forma parte de un grupo municipal.
"En el Ayuntamiento de Santander se ha aplicado rigurosamente la Ley y se le da el tratamiento al concejal no adscrito que dice la Ley. Otra cosa es lo que esas personas votan, que tienen libertad de voto y pueden ejercer como todo el mundo porque para eso conservan el acta", ha defendido la presidenta del PP.
Sáenz de Buruaga ha señalado que "la situación es distinta en el Parlamento" ya que este manera de proceder que fija el pacto antitransfuguismo no se ha trasladado al reglamento de la Cámara, lo que, ha permitido que, a su juicio, se haya dado el "absurdo" de que Carrancio pueda seguir en el grupo mixto tras abandonar Cs, con lo que "sigue manteniendo los derechos" que tenía. "Se llega a una situación más injusta", ha defendido la líder del PP cántabro.
Sáenz de Buruaga ha subrayado que en el caso de Carrancio el PP ya se posicionó "claramente" y "no apoyó" su permanencia en el grupo mixto al entender que debía pasar a ser diputado no adscrito. "Pero los servicios de la Cámara y los servicios jurídicos hicieron otra interpretación que nos condicionó", ha apuntado.
"¿Cuál es la salida? Pues cuando las leyes nos llevan a una situación tan absurda, tan incomprensible y tan poco admisible como la que estando viviendo cambiarlas: iniciar la reforma del Reglamento de la Cámara", ha defendido Sáenz de Buruaga.
La presidenta del PP ha lamentado que el Parlamento de Cantabria "no se ha hecho nada para no incentivar" conductas como la de Carrancio y cree que es "una asignatura pendiente" y ha asegurado que su partido está "predispuesto a sumarse a cualquier medida que contribuya a poner fin a esto".