La Consejería de Salud reconoce que los datos no son buenos y que la situación de las listas de espera en la comunidad requiere de reformas estructurales que no se pueden acometer en meses. Y es que, según las cifras dadas a conocer este martes, la lista quirúrgica cerró 2023 con 18.505 pacientes pendientes de una intervención y un tiempo de demora de 173 días. Unas cifras que han llegado a superar las 20.000 personas en octubre del pasado año y que, gracias a los acuerdos con profesionales como las peonadas, se han conseguido revertir ligeramente.
En consultas con un especialista, las listas de espera superan las 38.700 personas y los 91 días de demora, y hasta los 104 días sube el tiempo de demora para pruebas diagnósticas, cuya lista de espera llega a las 35.000 personas en Cantabria. Desde Salud, su responsable, César Pascual, reconoce que las cifras son malas, fruto de una mala confección de las listas que ha obligado a revisarlas.
Pascual ha informado que, dentro de las medidas que están poniendo en marcha para agilizar las listas de espera, además del próximo Plan de Choque, se aprobado el acuerdo marco para derivar pacientes a los hospitales de Santa Clotilde y Mutua Montañesa. Por otra parte, se convocarán plazas en el Hospital de Laredo para paliar el déficit de profesionales, que lleva arrastrando desde hace años, con la convocatoria de plazas de difícil cobertura.
Se trata de unos contratos, mediante los cuales, los profesionales optarán a las plazas por concurso, sin oposición, pero con compromiso de permanencia de tres o cuatro años para tener la plaza en propiedad. El consejero cree que el momento para captar profesionales es el propicio ya que, con el cambio de la ley, son muchos los facultativos en el resto del país con contratos de tres años que no se pueden renovar. Espera que la plantilla pueda estar completa en verano y poder abrir los dos quirófanos nuevos una vez se ha cerrado el contencioso que tenían pendiente.
