El fiscal del juicio a la 'tiktoker' cántabra denunciada por el robo de un perro -un cachorro de mastín- a una ganadero de Asón, en Arredondo, ha pedido este lunes la absolución de la joven en el juicio contra ella, celebrado en el Juzgado de Primera Instancia e Instrucción número 2 de Laredo y que ha quedado visto para sentencia.
El representante del ministerio público no ve delito en la actuación de la chica que, a finales del año pasado, se llevó el animal pensando que estaba abandonado y tras comprobar que no tenía microchip lo dio en adopción a otra persona.
El dueño del can y del rebaño, Roberto Abascal, denunció los hechos y tras la vista ha insistido, a través de su abogado, en que se condene a esta creadora de contenido en la red social 'TikTok' y a la mujer que adoptó a 'Chulo' a pagar una multa por apropiación indebida, una indemnización de 2.000 euros y a devolver el animal, que en el momento de los hechos tenía seis meses.
Ante el magistrado han declarado, además del denunciante y la denunciada, los testigos propuestos por cada uno: el veterinario de la explotación, dos ganaderos de la zona, el padre de la actual propietaria del mastín y una peluquera canina, han informado fuentes personadas a esta agencia.
Abascal y su letrado habían solicitado además una prueba de ADN del animal, que el juez ha rechazado al considerar que no es necesaria. Sí han podido aportar en cambio fotos de 'Chulo', las cartillas de sus padres -ambos en posesión de Abascal- y conversaciones por mensajería instantánea y redes con la denunciada.
Hechos
El ganadero se percató de la ausencia de uno de sus canes cuando lo tenía en el monte en la zona de los Collados del Asón -donde nace el río del mismo nombre- junto a otros tres mastines, que se encargan de cuidar el rebaño caprino -tiene unos 200 ejemplares en total-.
En concreto, vio por última vez al cachorro el 12 de diciembre y lo echó en falta en torno al día 14, aunque al principio no le dio mucha importancia, pues les deja comida para varias jornadas. Pero por esas fechas hacía mal tiempo y cuando eso sucede las cabras bajan de zonas altas a otras más bajas, próximas a la carretera.
Y en esas circunstancias, pasó por el lugar la chica denunciada y recogió al animal creyendo que estaba abandonado. De hecho, grabó cómo se lo llevaba a su casa, publicando en su cuenta en TikTok el vídeo, que vio Abascal el 20 de diciembre.
Así, contactó con ella a través de otras redes sociales para informarle de que el perro era suyo y pedirle que se lo devolviera, a lo que ella se negó alegando que lo había llevado al veterinario y, como no tenía chip, había buscado una familia y lo había dado en adopción.
El ganadero admitió que 'Chulo' carecía del microchip porque lo tenía en el monte, donde estaba cuidando de sus cabras, y allí no hay acceso para que vaya un veterinario a colocárselo. La idea era ponérselo cuando bajasen los rebaños a las cuadras, por lo que asume que deberá pagar una sanción o multa por haber incumplido la normativa, que establece que el identificador debe colocarse a los tres meses de edad del animal.