El oso joven rescatado el miércoles en el Parque de la Naturaleza de Cabárceno ha muerto este jueves al no superar los efectos de la anestesia administrada, ha informado el Gobierno de Cantabria en un comunicado.
Era la segunda vez en tres días que tenía que ser sedado para poder ser sacado de zonas de riesgo.
Su fallecimiento se ha producido en el espacio de cuarentena en el que se encontraba, atendido y controlado, desde que fuera rescatado por bomberos del 112 del borde de un peñasco del recinto que habitan estos animales.
El osezno se subió a un risco con caída vertical, peligroso para su integridad, consecuencia de su huida de los machos adultos que, en época de celo, tienden a atacar a los ejemplares más jóvenes.
Para evitar su caída, personal de Cabárceno procedió a sedar al animal y, posteriormente, con el ejemplar dormido en el filo de la peña, dos dotaciones de bomberos del 112 lo bajaron a zona segura, en una operación compleja, valiéndose de una autoescala y del montaje de un sistema de rescate vertical.
El osezno fue trasladado para su cuidado al espacio de cuarentena en el que finalmente ha fallecido.
SEGUNDA VEZ QUE QUEDABA ENRISCADO
Esta era la segunda ocasión en la que el mismo animal se quedaba enriscado evitando a osos de mayor peso y envergadura.
La primera tuvo lugar tres días antes, el pasado domingo, 12 de mayo, y fue resuelta íntegramente sin incidentes por el propio personal de la instalación, que también se vio obligado a sedar al animal para sacarle de un área de riesgo.
Finalmente, y "a pesar de los esfuerzos realizados, el ejemplar no ha podido superar el estrés de la situación y las dos anestesias en un corto espacio de tiempo".