El presidente de Cantabria, Miguel Ángel Revilla, iniciaba en la tarde de ayer un confinamiento preventivo tras mantener un contacto estrecho con un positivo de COVID-19. Contacto que se produjo en el marco de las negociaciones celebradas en la planta de SEG Automotive en Treto el pasado viernes.
Revilla insiste en que ayer, “marte y 13, fue un buen día” porque recibió la primera dosis de Pfizer. Pero que “a media tarde me sonó el móvil”, una llamada de una rastreador que le mandaba para casa por haber estado en contacto con una persona positiva “el viernes de la semana pasada”.
“Al haber estado más de media hora” con la persona infectada, el presidente cántabro tiene que confinarse hasta el próximo martes, 20 de abril. Además, tendrá que realizarse una prueba PCR en el día de hoy y otra el próximo domingo.
El líder regionalista califica la situación de “muy dura”, aunque reconoce que “más duro ha sido para aquellos que han tenido la desgracia de coger el virus, terminar en la UCI o, lo que es peor, algunos han muerto”.
“Me encuentro como un reloj”, explica Revilla en el vídeo difundido por el Gobierno de Cantabria. “La vacuna no me ha afectado”, insiste el presidente de Cantabria en la línea de lo expresado ayer una hora después de recibir la primera dosis de la vacuna contra el coronavirus.
Además, reconoce que “si en vez de haberme vacunado ayer, lo hubieran hecho hace más de 10 días” los médicos le han indicado que “no estaría” en un confinamiento preventivo.
Un vídeo que también ha colgado en la red social Twitter.
Confinamiento preventivo por un contacto estrecho en el ámbito laboral
El presidente de Cantabria, Miguel Ángel Revilla; el vicepresidente, Pablo Zuloaga, y el consejero de Industria, Turismo, Innovación, Transporte y Comercio, Javier López Marcano, iniciaban en la tarde del martes, 13 de abril, un confinamiento preventivo tras mantener un contacto estrecho con un positivo de COVID-19 en el ámbito laboral.
Los tres serán sometidos en las próximas horas a una prueba PCR, que se repetirá una vez transcurrido el periodo de incubación de la enfermedad con el fin de descartar toda posibilidad de contagio, conforme al protocolo establecido por la Consejería de Sanidad para este tipo de casos.
Como consecuencia del confinamiento, tanto Revilla como Zuloaga y López Marcano han suspendido su agenda oficial, aunque ninguno presenta síntomas compatibles con la COVID-19.