Estadística del INE

El riesgo de pobreza en Cantabria aumentó en 2024

Esta tasa se situó en el 17,3% el año pasado en Cantabria, según la Encuesta de Condiciones de Vida publicada hoy por el INE.

Alicia Real | María Gómez

Santander |

Crece el riesgo de pobreza en Cantabria en 2024, con una tasa que se situó en el 17,3%. Este es uno de los datos de la Encuesta de Condiciones de Vida que ha publicado hoy el Instituto Nacional de Estadística y en la que se desvela que el 6% de los cántabros sufren una carencia material y social severa.

Según esta Encuesta basada en datos de 2024, cerca de un 33% de cántabros no podía permitirse ir de vacaciones fuera de casa al menos una semana al año y un 26% no tenía capacidad para afrontar gastos imprevistos. El 6% de los habitantes de la comunidad se encontraban con muchas dificultades para llegar a fin de mes y un 8% se retrasó en los pagos relacionados con la vivienda principal o con las compras a plazos.

Problemas con las tarjetas monedero para personas vulnerables

Son cifras que hemos conocido hoy, día en el que el Gobierno de Cantabria reconoce que los más de 2.000 beneficiarios de las tarjetas monedero para personas vulnerables se encontrarán en las próximas semanas sin dinero porque todavía no ha resuelto qué empresa se encargará de un servicio que hasta ahora realizaba la ONG Cruz Roja.

El Gobierno de Cantabria mantiene que, ahora que el Estado les "obliga" a gestionar la tarjeta monedero para personas vulnerables, no han podido tramitar antes la prestación de este servicio. El director general de Atención Sociosanitaria, Eduardo Rubalcaba, sostiene que la tarjeta monedero no se ha paralizado en Cantabria. En sintonía de Onda Cero, explica que la última recarga se hizo en noviembre y está activa hasta este 30 de marzo.

A partir de esa fecha es cuando debe gestionarlo el Gobierno de Cantabria, con fondos del Estado ya transferidos, pero con la obligación de concursar el servicio a una ONGs. "En una semana" se resolverá este concurso, según Rubalcaba, pero después pasarán algunas semanas hasta que la adjudicataria llegue a acuerdos con empresas de distribución y alimentación de la comunidad para que los beneficiarios puedan realizar las compras.