La Comisión Informativa de Urbanismo y Movilidad ha dado el visto bueno a la delimitación de la Zona de Bajas Emisiones que se implantará, por exigencia de la Comisión Europea, en todas las ciudades con más de 50.000 habitantes.
Los límites los marcan las calles La Llama, Julián Ceballos, José María Pereda y Julián Urbina. Por ellas se podrá circular, pero en su interior solamente lo podrán hacer los vehículos menos contaminantes y los vecinos de la zona, que podrán seguir circulando sin restricciones. PP y Vox han votado en contra de esta delimitación que el Ayuntamiento considera de "consenso máximo" entre grupos políticos y colectivos. La concejala de movilidad, Jezabel Tazón, destaca el mensaje de "tranquilidad" antes de su implantación, que requerirá de la colocación de sensores de contaminación y de una fase de prueba que se pondrá en marcha próximamente.
Insuficiente para la Mesa de Movilidad del Besaya
Javier Polanco, portavoz de la Mesa de Movilidad del Besaya, insiste en la necesidad de implantar una ZBE en el interior del Bulevar Ronda. Asegura que los límites son más claros para los conductores y que, de esta forma, se protegería a cerca del 70% de los vecinos, garantizando especialmente que los efectos del tráfico no afecten a los colectivos más vulnerables en colegios, centros de salud o geriátricos.
La Mesa considera "liliputiense" la propuesta del Ayuntamiento, y añade que se ha olvidado el sentido original de una medida destinada no exclusivamente a imponer restricciones al tráfico, sino a garantizar que los vecinos no sufran los perjuicios de mismo.
Torrelavega, añade Polanco, soporta un volumen de tráfico muy alto en sus calles principales (donde no habrá restricciones), fruto de recibir a los 120.000 habitantes que tienen a la ciudad como núcleo de referencia.
Innecesaria para la Cámara de Comercio
La Cámara de Comercio de Torrelavega convocará una reunión con las principales asociaciones de comerciantes de la cuidad para evaluar la delimitación anunciada por el Ayuntamiento.
Consideran, sin embargo, que la capital del Besaya cumple ya con los límites de contaminación que establece la Unión Europea y que, por lo tanto, está exenta de la aplicación de esta medida.
El presidente de la entidad cameral, Carlos Augusto Carrasco, considera que "en nuestra ciudad las emisiones son bajas, al igual que en Pontevedra, y esta ciudad está eximida del cumplimiento de implantación de la zona de bajas emisiones".