Un 70% de parados y 17% de ocupados cántabros en riesgo de pobreza, según UGT

Según destaca este sindicato en una nota de prensa, esa tasa no sólo la pobreza relativa o monetaria, sino también la privación de bienes materiales básicos y la mayor o menor intensidad del trabajo en los hogares.

Además, precisa que el anexo estadístico de una guía elaborada por el Instituto para la Cooperación y el Desarrollo de UGT, el riesgo de pobreza y exclusión social en el mercado laboral de Cantabria aumentó de manera significativa el año pasado.

Según esa estadística, el riesgo de pobreza y exclusión social afecta ya al 28% de la población activa (78.242 ocupados y desempleados) de la región, pese a coincidir con un crecimiento económico de Cantabria de un 2,3% de su Producto Interior Bruto (PIB).

UGT añade que las estadísticas de la Tasa AROPE confirman que el riesgo de pobreza y exclusión social aumentó el año pasado cuatro puntos entre los ocupados (de un 13 a un 17%) y más de 17 puntos entre los desempleados incluidos los demandantes de empleo no ocupados o Denos (de un 53 a un 70,4%).

También se incrementó dos puntos entre los jubilados (de un 5,2 a un 7,3%) y cuatro puntos y medio entre los inactivos laborales cántabros que no son jubilados (de un 28,2 a un 32,7%), según esa estadística.

El sindicato señala, además, que el Instituto para la Cooperación y el Desarrollo precisa que en el año 2015, cuando la economía cántabra y la española llevaban dos años de crecimiento tras la recesión de los años de la crisis económica, el riesgo de pobreza y exclusión social disminuyó significativamente.

Según ese instituto, el porcentaje de la población afectada en Cantabria se redujo hasta 7 puntos (de un 27,4 a un 20,4%), un 5% en el caso de los cántabros que tenían un empleo (de un 18 a un 13%).

Sin embargo, UGT añade que el año pasado la Tasa AROPE repuntó de nuevo en la región y "reafirmó un incremento general del riesgo de pobreza y exclusión social que no se corresponde con la marcha de la economía y que, en el caso de los desempleados, no ha cesado de crecer antes y después de este repunte económico de los tres últimos años".

En este sentido indica que, según la Encuesta de Condiciones de Vida de Cantabria de 2016 que elabora el Gobierno de Cantabria, la Tasa AROPE entre los desempleados se ha duplicado desde 2012 de un 36% al mencionado 70,4% del año pasado.

UGT recalca que en este notable incremento del riesgo de pobreza y exclusión social influye el alto porcentaje de hogares cántabros que siguen teniendo al menos uno de sus miembros en el desempleo, un 27%, de los que un 51,4% no percibe ninguna prestación por desempleo.

Argumenta, en este sentido, que al término del año pasado, en Cantabria, más de la mitad de los desempleados registrados en el Servicio Público de Empleo Estatal (SEPE) no percibían ninguna prestación por desempleo (20.759 de un total de 35.650) y otro 26% (11.462) ingresaban como mucho una prestación asistencial de 426 euros mensuales.

UGT también denuncia el "significativo deterioro" del empleo y apunta que, al término de 2016, Cantabria superó, por segundo año consecutivo desde que se facilitan estadísticas oficiales, el 93% de contratos temporales (93,35% ó 219.054 de un total de 234.670).

De esos contratos, un 41% fueron de menos de siete días (90.233), lo que implica también la mayor cuantía y el mayor porcentaje computado hasta ahora de estos contratos de menor duración, señala el sindicato.

Además, indica que en Cantabria se contabilizaron "otros máximos históricos de precariedad laboral", al rebasar por primera vez los tres contratos de trabajo firmados por la misma persona (rotación contractual), en concreto 3,14%; y registrarse el mayor porcentaje de contratos a tiempo parcial hasta ahora, un 38,21% (89.699).

UGT concluye que, según la Encuesta de Población Activa (EPA), Cantabria cerró el año 2016 con un total de 200.744 asalariados, de los que 51.216, un 25,5% del total, tenían un contrato temporal, el mayor porcentaje de los últimos nueve años.