Adelantar las compras para aprovechar las ofertas en ropa y papelería, preguntar en el colegio por los programas de libros gratuitos, recurrir al consumo colaborativo… y, sobre todo, salir de compras sin los hijos.
OCU calcula que siguiendo algunos de estos sencillos consejos es posible reducir significativamente los cerca de 500 euros en gastos de vestuario y material escolar por hijo estimados para empezar el colegio.
Además de la cuesta de enero, las familias con hijos enfrentan otra dura cuesta, la de septiembre, que comprende los gastos adelantados en vestuario y material escolar para el nuevo curso. Una cuesta que suma alrededor de 500 euros por alumno en compras de zapatos, chándals, polos, pantalones… pero también de cuadernos, rotuladores, lápices o reglas, y que varía según el nivel educativo y el tipo de colegio.
Y eso sin contar otras partidas, como la matricula, las cuotas del colegio, las extraescolares, el comedor o las cuotas de AMPA, que sumadas a las anteriores superan los 2.000 euros al año por alumno, de media. No obstante, existen formas de ahorrar, asegura OCU.
1. Hacer una lista con lo que ya se tiene en casa. Nuevo curso no significa que todo deba ser nuevo: si una mochila está en buen estado, ¿por qué comprar otra?
2. Adelantar las compras en la medida de lo posible: en agosto abundan las ofertas y descuentos de ropa y material escolar.
3. Consultar los programas de libros gratuitos basados en sistemas de préstamo que ofrecen las comunidades autónomas a través de los colegios.
4. El consumo colaborativo es otro posible ahorro. Existen iniciativas que favorecen el intercambio de ropa, libros y material escolar de segunda mano entre padres y asociaciones escolares.
5. Para las lecturas recomendadas, la opción más económica es tomarlas prestadas de las bibliotecas o preguntar en el AMPA si gestionan libros usados del curso anterior.
6. Y, para huir de las tentaciones, mejor salir de compras sin los niños. Lo más probable es que se encaprichen con artículos que incluyan a alguno de sus personajes favoritos, por lo general más caros.
Por cierto, la vuelta al cole es un buen momento para recuperar buenos hábitos en la alimentación de los hijos. Para el recreo o la merienda evite la bollería industrial y las bebidas edulcoradas y sustitúyalas por fruta, frutos secos, leche y bocadillos caseros con pan integral... Es bueno para su salud y no resulta necesariamente más caro.