La ley obligará a cambiar el modelo de calefacción central que en nuestro país tienen 1.400.000 hogares todavía. Será en mayo de 2023 cuando estos edificios tendrán que individualizar sus gastos, instalando repartidores de costes que remitirán a una centralita el flujo de calor de cada radiador del domicilio. Antonio Fuentes, presidente del Colegio de Administradores de fincas de Albacete, explica cómo afectará en nuestra ciudad.
Esta situación podría suponer un coste de alrededor de 450 euros por piso en el 90 por ciento de los edificios que tienen su modo de calefacción establecido por columnas, pero que, en otros casos, podría encarecerse más. Paula Montoya, una de las afectadas en nuestra capital, expresaba sus dudas acerca de esta modificación.
Las comunidades tienen un plazo de quince meses (dependiendo del número de inmuebles comienza antes o después) para ejecutar unos cambios que tienen como límite el mes de mayo de 2023 y que persiguen un modelo de calefacción que ahorre en energía.