La mejora en la dotación de la enfermería, en palabras del presidente de la Sociedad de Cirugía Taurina y cirujano jefe de la plaza de toros de Albacete, Pascual González Masegosa, ha permitido que “sea una de las mejor dotadas del país”
El alcalde, Emilio Sáez, y el vicealcalde y responsable de Asuntos Taurinos, Vicente Casañ, han podido conocer en detalle los equipamientos con los que cuenta este servicio localizado junto al patio de caballos de la plaza de toros, y lo han hecho acompañados de Jorge Espinosa, director Territorial de Desarrollo de QuirónSalud, a quien han agradecido su implicación para poder tener a punto el servicio de quirófano en un lugar tan singular como es una plaza de toros.
El punto de partida de esta colaboración fue la necesidad de disponer del aparataje de anestesia actualizado, pues contar con estos equipos que son muy costosos, del orden de entre 15.000 y 20.000 euros, y que se deterioran por la falta de uso, suponía una notable inversión. Así, en virtud de este acuerdo, QuirónSalud facilita este equipamiento de última generación, exclusivamente para los días en los que hay festejos taurinos.
El doctor Masegosa ha aprovechado esta visita a la enfermería para agradecer a QuirónSalud que, además del equipamiento, haya facilitado un servicio técnico para realizas las comprobaciones oportunas y cerciorar que todo el aparataje y equipamiento funciona como es debido, “la enfermería ha estado casi dos años cerrada, sin uso, y era necesario hacer esta revisión”, ha recalcado el cirujano.
Desde el Equipo de Gobierno, alcalde y vicealcalde, han agradecido el trabajo que hacen las 10 personas que integran el equipo médico de la plaza de toros, en concreto, son cuatro cirujanos, un cirujano vascular, un traumatólogo, dos anestesistas y dos personas de enfermería, los que cada tarde que hay festejos están pendientes de posibles cogidas en la plaza.
La enfermería dispone de un quirófano y una sala de curas que, gracias al equipamiento de monitores, respiradores y anestesia con el que cuentan, puede transformarse en un quirófano, de tal forma que en caso de necesidad podrían intervenir a dos personas al mismo tiempo, “no es habitual, pero ha ocurrido”, ha advertido González Masegosa, cirujano que, ante todo, se declara aficionado a la tauromaquia.
