Aviones de caza, transporte y reabastecimiento de la Luftwaffe, l’Armée de l’Air et de l’Espace y del Ejército del Aire y del Espacio han despegado este miércoles para materializar un ambicioso proyecto que se ha denominado Pacific Skies.
De la Base Aérea de Albacete se han desplegado 76 militares, 12 de ellos pilotos, y el resto personal de apoyo y mecánicos.
Se trata de un despliegue sin precedentes que nace con la idea de mostrar la capacidad conjunta de tres fuerzas aeroespaciales aliadas para operar una potente fuerza en cualquier rincón del mundo. Un evento que recorrerá principalmente la zona del IndoPacífico y que finalizará en la India, en la base de Sulur, el 15 de agosto.
Durante el despliegue está previsto participar en los ejercicios Arctic Defender (Alaska), Pitch Black (Australia) y Tarang Shakti (India), además de realizar paradas logísticas en algunos de los países de la zona como Japón, Filipinas o Malasia.
Los tres países europeos implicados en el programa Future Combat Air System (FCAS) desplegarán nada menos que 28 aviones de combate y 16 grandes aviones cisterna y de transporte. Un despliegue que se realiza únicamente con medios desarrollados por la industria de defensa europea, con lo que se demuestra la capacidad de esta para desarrollar productos aeroespaciales de primer nivel como el Eurofighter, el Rafale, el A330 MRTT o el A400M.