La Diputación de Albacete, a través de su presidente, Santi Cabañero, ha avanzado la reedición de la colaboración de la institución en la celebración del esperado Festival de Música Leturalma de cara a 2024.
Este evento, que se ha convertido en un referente en el panorama cultural de la región, se ha presentado en el Teatro Circo con la participación de su impulsora, la artista albacetense María Rozalén, y un pequeño adelanto de las y los protagonistas que, junto a ella, harán las delicias del público del 18 al 20 del próximo julio en Letur: Junto a Rozalén, estarán en Leturalma 2024: Luz Casal, La Pegatina, La Oreja de Van Gogh, Boikot+ Celtas Cortos, Vicente García, Bewis de la Rosa, Los Niños Jesús (grupo de Jordi Évole), Botifarra, Markena,+Hada Afrosweet, Vuelo Fidji, Niftys, Carajillo, Alarmantiks, Collado Project y próximas confirmaciones.
Cabañero ha mostrado su admiración por este festival, destacando la importancia de la música como herramienta de “unión y expresión cultural”. Así, ha asegurado que Leturalma no es solo un festival, sino “una celebración de nuestra identidad, de nuestras raíces” y un espacio donde la música y la cultura se funden para impulsar el desarrollo rural de Letur y de toda la Sierra del Segura, mostrándose orgulloso de que Rozalén, una de las embajadoras más queridas de la provincia, esté a su frente.
Tal y como viene siendo (en constante crecimiento) desde su nacimiento en 2017, el festival de música Leturalma 2024 promete ser “un escaparate de talento”, ofreciendo una variedad de géneros y estilos musicales junto a múltiples actividades desde una visión familiar, transversal y universal. El presidente de la Diputación se ha comprometido a seguir apoyando este evento, no solo como un espectáculo artístico, sino como el motor de progreso que es para su entorno.
Cabañero ha puesto en valor “la valentía y la autenticidad” que caracterizan a Rozalén y a cuantas actividades lleva a cabo, dentro y fuera de la música, y siempre apoyando y poniendo en valor todo vínculo a sus orígenes.
Una actitud que, ha señalado, entronca directamente con la propia razón de ser y la filosofía de la Diputación, celebrando la ‘cultura rural’ a través del arte y la música y resignificando los pueblos como esos espacios llenos de oportunidades que son; conectando directamente con las raíces, para inspirar y transformar desde lo rural; innovando desde la tradición (algo que, como en pocos lugares, ha reflexionado que sucede en los pueblos); empoderando las economías rurales, familiares, circulares, sostenibles y de escala; y aprovechando lugares únicos para hacerlos revivir, haciendo algo tan aparentemente simple como mostrarlos con eventos como Leturalma.