La Delegación de Castilla-La Mancha de la Organización de Consumidores y Usuarios (OCU) advierte del incremento de precios abusivos en servicios de urgencia aprovechando las prisas del consumidor, sobre todo cuando se ha perdido una llave o se ha olvidado dentro de casa. Se han detectado servicios de cerrajería que cobran hasta 300 euros por abrir la puerta, cinco veces el precio medio del mercado, por actuaciones que no han llevado más de 10 minutos sin precisar el cambio de la cerradura.
Aunque la fijación de precios es libre, OCU considera tales prácticas abusivas, ya que en estos casos normalmente se niega un presupuesto previo, alegando que se ha de revisar antes el estado de la puerta y la cerradura. Es más, en alguna situación, incluso se identifican falsamente como empleados de empresas reconocidas del sector.
Por otro lado, también ha aumentado el número de quejas de usuarios que tienen contratada una póliza del hogar con cobertura para este tipo de siniestros: a veces, cuando la aseguradora no dispone de asistencia propia en la zona, se emplaza al cliente a buscar un profesional externo, que deberá pagar de su propio bolsillo. El problema es que, si la compañía considera luego que el precio era excesivo, suele negar el 100% del reembolso.
Por eso OCU recuerda a los consumidores que ante una urgencia:
1.- Deben priorizarse siempre los profesionales conocidos, de la zona, o en su defecto, las empresas solventes en el sector. No es mala idea grabar en el móvil los teléfonos de los cerrajeros, fontaneros y electricistas del barrio.
2.- Antes de aceptar un servicio es preciso pedir un presupuesto previo, lo más detallado posible y, si fuera necesario, remitiendo fotos que permitan evaluar la avería y su coste.
3.- Si el precio final resulta desorbitado, no debe firmarse la factura o cualquier otro documento, ya que podría impedirle reclamar posteriormente. Si lo hace, detalle la falta de conformidad, expresando brevemente los motivos.