En un comunicado aseguran que "entienden que, aún con la intención de mejorar la experiencia de las personas que van a pie, la medida penaliza otras formas de desplazamiento, de asistencia social o de negocio, que también contribuyen a lograr una movilidad urbana más segura y saludable, equiparando los requisitos que se les exige a los del tráfico motorizado"
Añaden que "esta iniciativa del Ayuntamiento va en contra de su actual Plan de Movilidad Sostenible Urbana (PMUS), documento de obligado cumplimiento para recibir los fondos europeos de la Estrategia de Desarrollo Urbanos Sostenible e Integrado (EDUSI)", y creen que con el adecuado estimulo institucional y favoreciendo trayectos cómodos y seguros, la ciudadanía es favorable a desplazarse de forma sostenible, como quedó demostrado el pasado domingo 26 de septiembre donde un millar de personas de toda condición, mayoritariamente en bici, hicieron un recorrido de más de 7 kilómetros por la ciudad, y con esa distancia se puede alcanzar cualquier punto del casco urbano de Albacete.
Prohibir el paso en todo momento por un eje tan importante de la ciudad a medios necesarios para el cambio de movilidad supone, en su opinión, un desprecio a la Ordenanza en vigor que ya da solución al futuro espacio peatonal (observemos Rosario o Mayor de características parecidas), anteponiendo los hipotéticos problemas derivados a los beneficios contrastados, puede suponer un gran parón en la complicada senda del futuro sostenible de Albacete, hasta ahora en línea con otras ciudades medianas y grandes, que es difícil de defender en foros de lucha contra el Cambio Climático, como el estratégico y mediático "Diálogos sobre el Futuro. La Movilidad y el Transporte", organizado por el Gobierno de España los días el 18 y 19 de noviembre.