La Policía Local de Albacete ha realizado balance de las incidencias atendidas y relacionadas exclusivamente con los fenómenos meteorológicos con viento de los que hemos sido testigos en nuestra ciudad durante los pasados días, concretamente, desde el día 2, cuando se procedió a la activación del Plan de Emergencias Territorial de Albacete (PLATEMUN) ante las previsiones que alertaban de rachas de fuertes vientos que podían alcanzar los 100 Km/h y se activaba el METEOCAM para la región, hasta el pasado día 6, cuando se desactivó.
En total, la Policía Local de Albacete ha realizado 168 servicios relacionados con las borrascas ‘Ciarán’ y ‘Domingos’, en su mayoría caídas de ramas o de árboles, cables de tendido eléctrico descolgados, caída de tejas o desprendimiento de cascotes de algunos inmuebles, así como señales o cartelería desprendida.
Los servicios relacionados con las fuertes rachas de viento se multiplicaron de forma exponencial, siendo el jueves 2 de noviembre la jornada más intensa, con 114 servicios relacionados con este fenómeno meteorológico adverso. El episodio de mayor gravedad fue el sucedido en el inmueble de la calle Arquitecto Vandelvira, donde se tuvieron que desalojar de inmediato 16 viviendas, ofreciendo a los vecinos todo tipo de ayuda y asistencia.
Afortunadamente, las borrascas solo causaron daños materiales y los incidentes se resolvieron de una manera satisfactoria para la seguridad.
Cabe recordar que desde la activación del PLATEMUN se pusieron en marcha todos los recursos municipales en cuanto a intervención, orden, sanitarios, logístico y técnico.
La respuesta de los Servicios de Seguridad y Emergencias de Albacete fue rápida y efectiva. La Policía Local y Bomberos, junto con otros profesionales de Salud Ambiental, Movilidad Urbana y Arquitectura del Ayuntamiento actuaron con la diligencia necesaria para la seguridad de los ciudadanos y la estabilización de la situación.
La solidaridad y la unidad de la población de Albacete también se hicieron evidentes durante estos días de adversidad, ya que vecinos y voluntarios se unieron a los esfuerzos de las autoridades y los servicios de emergencia, comunicando las incidencias según se iban produciendo.
Los parques públicos de la ciudad se cerraron de inmediato, así como las instalaciones deportivas al aire libre, como medida cautelar y de precaución ante los riesgos que pudieran derivarse.
En la actualidad, todos los parques de la ciudad están abiertos, tras las correspondientes inspecciones por parte de los técnicos municipales para una mayor garantía de la seguridad.
