Una medida que consideran no se justifica ni fundamenta en ninguna razón legal o sanitaria, y se impone unilateralmente por parte de la Dirección. CCOO y UGT, sindicatos mayoritarios en Correos, han denunciado que la dirección de la empresa ha cambiado las instrucciones de entrega de las notificaciones, burofax y telegramas, obligando a que el destinatario/a tenga que estampar su firma por dos veces, en el terminal PDA y en el resguardo de papel del acuse de recibo. Desde el inicio de la pandemia, todos estos envíos no se entregaban bajo firma, sino que se evitaba el contacto físico entre cartero y destinatario, y se le entregaba el envío previa identificación fehaciente del mismo, siendo legalmente válida la entrega. Así ocurría con estos envíos, y también con el resto de envíos registrados, como la paquetería, e incluso con la documentación del voto por correo.
Los sindicatos denuncian que este cambio de operativa convertirá a los trabajadores de reparto en un vector de contagio a la ciudadanía y aumenta su riesgo particular al hacer firmar a un destinatario tras otro en el mismo terminal, y compartiendo bolígrafos. La dirección ha implantado este cambio de manera ilegal, al omitir la obligación legal de consultar a los trabajadores, a través de sus representantes, las decisiones organizativas que puedan afectar a la salud y seguridad de la plantilla. Tras la denuncia, la dirección de la empresa se reafirma en que, a su juicio, no existe un incremento del riesgo porque el repartidor/a lleva mascarilla y un frasquito de gel, y además puede “estirar los brazos” para que le firmen sin riesgo. La medida se anunció el pasado viernes a última hora sin dar posibilidad de respuesta, y ha entrado en vigor directamente esta misma mañana, causando una gran indignación entre el personal, y sorpresa entre los ciudadanos/as, que reciben los envíos con recelo ante el cambio de operativa.
En una nota de prensa, critican que, una vez más, el presidente de Correos vuelve a demostrar su desprecio a la ley, y que lo único que le importa es mantener la producción de la empresa sin importar la salud de los trabajadores/as, ni en Correos, ni en otras empresas del grupo empresarial, como Correos Express, en la que se contrata a trabajadores autónomos, que progresivamente van asumiendo el trabajo del personal de la empresa matriz, en lo que solo puede calificarse como una devaluación y precarización del empleo.
CCOO y UGT recuerdan que desde el pasado mes de abril se han iniciado movilizaciones en Correos, para exigir al Gobierno, que es el responsable último de garantizar el servicio postal a la ciudadanía, que corrija la nefasta gestión de recortes emprendida por Serrano, que abocan a la empresa pública a un cambio de modelo de servicio público, hacia otro logístico y de paquetería en el que prime solo la rentabilidad