En un comunicado conjunto, las asociaciones Ecologistas en Acción , la Sociedad de Ornitología de Albacete, Arba Albacete y la Asociación de Amigos del Jardín Botánico, han criticado que , desde hace años, "estamos asistiendo en la ciudad de Albacete a tratamientos severos de poda del arbolado urbano", con la supuesta justificación de “recortes” de formación o para evitar molestias al vecindario, por la proximidad de las ramas a los edificios, o para eliminar ramas en mal estado y prevenir posibles peligros de daños a personas o bienes, ante el riesgo de caída de estas. Estos tratamientos, no siempre necesarios y, en muchas ocasiones, sistemáticos, aunque no se adapten a los objetivos mencionados, han dado como resultado la proliferación de daños en el arbolado, como consecuencia de las heridas que se le ocasionan, que les han producido podredumbres, deterioro del crecimiento y envejecimiento prematuro.
Añaden que "ha sido frecuente la eliminación de algunos de esos árboles dañados, como consecuencia del deterioro ocasionado". En muchas ocasiones, además, la mala elección de las especies plantadas ha originado la muerte de muchos ejemplares, mal adaptados al riguroso clima de Albacete. También la elección de especies de crecimiento rápido ha ocasionado muchos de los problemas que luego se han querido solucionar con podas que han acelerado su crecimiento deformado y el envejecimiento prematuro. A todos estos problemas se le añade la poda o supuestos “recortes” fuera del periodo de parada vegetativa de los árboles (que se produce en invierno), cuando todos los daños expuestos son aún más graves y, por si no fueran suficientes, causando alteraciones a muchas aves que están en periodo de reproducción primaveral y con los nidos en las ramas de ese arbolado. Para evitar estas situaciones, la propia Ordenanza Municipal establece finales de marzo como los días en los que deben finalizarse estas tareas. Así lo manifestó incluso, el concejal responsable de Medio Ambiente, del ayuntamiento de Albacete, en la última semana de marzo de este año.
Un árbol bien formado con toda su copa, con todas sus hojas, puede absorber, según cierta estimación, unos 150 kg de CO2 al año y así contribuir a la mitigación del cambio climático. Al mismo tiempo nos aporta oxígeno. Absorbe partículas contaminantes que, tal y como advierte la O.M.S., aumentan el riesgo de que padezcamos o, directamente provocan, enfermedades respiratorias, cáncer, enfermedades cardíacas…. Los árboles con copa nos dan sombra en verano y, por lo tanto, reducen las temperaturas de forma natural contribuyendo a nuestro confort y actuando doblemente contra el cambio climático. Reducen el impacto del viento, los ruidos e incluso aumentan el valor de las propiedades.
Sin embargo, durante todo el mes de abril y en los días trascurridos del mes de mayo, seguimos viendo que la empresa responsable del mantenimiento del arbolado continúa con las tareas de poda, alegando que se trata “simplemente”
de recortes de las ramas secas de pequeño tamaño y que no afectan al tamaño de la copa de los árboles. Aseguran tener constancia," a través de numerosas fotografías y videos que hemos ido haciendo durante estos cuarenta días, de que se trata de podas en ocasiones muy severas, con ramas verdes de muchos centímetros de diámetro y que hemos podido comprobar que había nidos en esos árboles, que han sido abandonados por las aves como consecuencia de las molestias causadas". Por otra parte, las durísimas condiciones meteorológicas de este año, sin lluvias en lo que va de año y temperaturas muy altas, agravan el estrés que produce en los árboles las podas y la posibilidad de enfermedades y de daños, además de suponer un empeoramiento en las condiciones de las aves que anidan en ellos. Unos hechos que les han llevado a denunciar la situación ante la concejalía y en el ayuntamiento, sin, aseguran, obtener una respuesta, ni conseguir que se ponga fin a estas tareas inapropiadas.
Denuncian que no se tienen en cuenta los ciclos naturales de las especies silvestres en plena época de cría y estos trabajos de mantenimiento que se acometen de forma «indiscriminada» en espacios verdes urbanos ocasionan daños, destrucción de nidos e incluso la muerte a las crías. Estas prácticas podrían incluso incumplir la Ley de Patrimonio Natural y de la Biodiversidad que prohíbe dar muerte, molestar o inquietar intencionadamente a los animales silvestres y «cualquier actuación hecha con el propósito de darles muerte, capturarlos, perseguirlos o molestarlos, así como la destrucción o deterioro de sus nidos y lugares de reproducción, invernada o reposo».
Por todas las razones expuestas, exigen al alcalde que tome cartas en el asunto y obligue a quien corresponda a que se cumpla la Ordenanza Municipal, que prohíbe las tareas de poda del arbolado más allá de finales de marzo, y se ponga fin a esta situación, sin descartar llegar a la vía judicial, para que actúe la fiscalía, por si pudiera suponer una infracción o un delito ecológico, en algunos de los casos comprobados de daño al arbolado o a las aves.
