La Escuela Municipal de Idiomas de Miguel Esteban se encuentra funcionando a pleno rendimiento. Un total de 110 personas, desde niños de 5 años hasta adultos, asisten a estas clases con el objetivo de familiarizarse con el inglés o perfeccionar su nivel.
La concejal de Cultura, Esperanza Ramírez, ha recordado que esta escuela lleva funcionando 10 años gracias a la colaboración existente entre el Ayuntamiento miguelete y la empresa ‘Get Brit’. Durante ese tiempo, han sido muchas las personas que han pasado por sus instalaciones para obtener un certificado oficial, aprenderlo como segundo idioma y poder incorporarlo a su vida cotidiana, o perfeccionarlo por motivos de trabajo o para viajar.
Ramírez ha señalado que desde el Ayuntamiento “siempre hemos apostado y seguiremos apostando por los idiomas, porque somos conscientes de que el inglés cada vez abre más puertas a nivel laboral y es muy importante a nivel académico”.
En este sentido, la concejal ha recordado que, en los últimos años, la Concejalía de Cultura del Ayuntamiento miguelete puso en marcha unos campamentos de inmersión lingüística en la Pradera de San Isidro para que niños y adolescentes continuaran aprendiendo inglés de una forma divertida durante el verano. “Es una actividad que siempre ha tenido muy buena acogida y que queremos seguir manteniendo, aunque ahora, debido a la pandemia, toca continuar siendo prudentes y esperar para poder disfrutar de esta y otras actividades”, apunta Esperanza Ramírez “porque no es lo mismo asistir a clases que convivir durante una semana con personas de diferentes edades”.
Por su parte, una de las profesoras de la Escuela de Idiomas, Angélica Sánchez, ha señalado que “aunque al principio de curso hubo menos alumnos por el temor al Covid, según avanzaban las semanas se fueron inscribiendo más y se puede decir que las clases no se han resentido y están prácticamente al mismo nivel que otros años”.
Asimismo, ha resaltado que “las clases que se imparten son muy prácticas y dinámicas, se utiliza una metodología muy activa y con muchos juegos y eso las hace muy atractivas”.
En la Escuela de Idiomas se cumplen escrupulosamente todos los protocolos anticovid, entre ellos, el uso permanente de mascarilla y de gel hidroalcohólico, la distancia de seguridad y la desinfección de mesas entre clases, además de mantener las ventanas abiertas en todo momento. El número de alumnos por grupo no ha tenido que reducirse puesto que “siempre contamos con grupos reducidos para favorecer el aprendizaje, así que no ha sido necesario adoptar medidas especiales en este sentido”, señala la profesora.