En coordinación con Cruz Roja, el Ayuntamiento de Ciudad Real había habilitado una solución para estas personas en diversos establecimientos de la capital.
Pero ante el anuncio de cierre de uno de ellos, se ha procedido a habilitar las estancias con las que cuenta la Casa de la Ciudad para que las personas que se encontraban allí, también estén protegidas del COVID-19.
Se trata de personas que no tienen síntomas de esta enfermedad, y que aquí recibirán alimentación y realizarán su aseo, ya que estarán confinados hasta que concluya el estado de alarma decretado.
Su evolución será controlada por educadores sociales de la Concejalía de Acción Social y voluntariado de Cruz Roja.
Así desde la Concejalía de Acción Social se está atendiendo a las personas que carecen de un hogar con las mismas garantías sanitarias que el resto de la población.