Ciudad Real |
Durante una rueda de prensa a través de las redes sociales, la alcaldesa de Ciudad Real, Pilar Zamora, ha anunciado que la próxima semana hablará con las organizaciones empresariales para analizar la situación y las medidas que puede poner encima de la mesa el Ayuntamiento para ayudar a las empresas locales y al pequeño comercio.
Además, cuando termine el estado de alarma se realizarán las contrataciones correspondientes al Plan de Empleo.
En materia de movilidad, las tarjetas de transporte que caduquen desde el 14 de marzo hasta el 31 de diciembre se renovarán automáticamente por dos años.
Y en cuanto a la fiscalidad, el Ayuntamiento retrasa el período de cobro de todos los tributos y no se computará como días hábiles el tiempo que dure el estado de alarma para presentar la liquidación de las plusvalías.
El Obispado de Ciudad Real pone a disposición del Sescam el Seminario por si es necesario, y el consistorio, según ha avanzado la primera edil, destinará todo el superávit del año pasado a paliar los efectos del coronavirus en la capital.
Zamora ha hecho un repaso a todas las medidas que se han ido tomando por parte del Ayuntamiento de Ciudad Real desde que se decretó el estado de alarma y ha dado a conocer una serie de cifras.
La Policía Local ha levantado 411 actas por infracción de las normas del estado de alarma con un detenido, ha realizado 850 rondas de vigilancia y 243 controles de movilidad.
El tráfico se ha reducido en Ciudad Real entre un 75 y un 90 por ciento, mientras que el número de usuarios del autobús urbano ha disminuido en un 90%.
Según Zamora, los trabajadores de la concejalía de Acción Social atienden una media de 60 llamadas telefónicas al día, se está atendiendo a los transeúntes y sin techo alojándolos en la Casa de la Ciudad y el servicio de ayuda a domicilio se sigue prestando.
La alcaldesa de Ciudad Real ha traslado a los grupos de la oposición las nuevas medidas que va a adoptar el consistorio y les ha pedido responsabilidad y que las apoyen.
Pilar Zamora dice que no van a escatimar medios y esfuerzos para ayudar a los vecinos.