García-Page aludía así, en un acto electoral celebrado en la localidad toledana de Bargas, al proyecto que llevará a cabo la empresa Skydweller SL, que fijará su domicilio social en el aeropuerto de Ciudad Real, donde ubicará su almacén, hangar e instalaciones.
La empresa norteamericana se encargará de los desarrollos necesarios para la posterior fabricación de drones que serán utilizados tanto para su comercialización como para la prestación de servicios directos.