Fuentes policiales han informado a EFE este lunes de que inicialmente abrió una investigación para esclarecer el caso, pero se ha cerrado al quedar como una actuación de auxilio.
Estas mismas fuentes han señalado que se pudo comprobar que la acción del joven respondió a una "chiquillada" motivado por el "estado de embriaguez que presentaba" y que su acción fue "voluntaria".
Los hechos sucedieron sobre las 23.15 horas del jueves, en una zona de las vías situadas frente a un aparcamiento, que suele ser punto de encuentro de jóvenes donde se reúnen para hacer botellón y, de hecho, en un vídeo que circula en redes sociales donde se ve el momento del suceso, se puede ver y escuchar a otros jóvenes que gritan cuando se produce la descarga eléctrica.
Al parecer, el chico accedió indebidamente a las vías del AVE y subió hasta la catenaria, momento en el que recibió una importante descarga eléctrica que lo hizo caer al suelo envuelto en llamas.
El chico tuvo que ser trasladado al Hospital Universitario de Getafe, donde quedó ingresado en la Unidad de Grandes Quemados y donde se le ha practicado una traqueotomía para mejorar su seguridad clínica, según han informado a EFE fuentes de este centro hospitalario.
Cuando ingresó, el joven tenía un 40% de superficie corporal quemada y el 10% de las quemaduras eran profundas, en cara, tronco, espalda y miembros superiores, y, además, presentaba varias fracturas en la zona pélvica.