Gómez cree que había muchas ganas de Semana Santa y de volver a una cierta normalidad tras dos años de parón debido a la pandemia del covid. Además, reconoce que el tiempo ha acompañado y hacía años que todas las hermandades no desfilaban sin problemas meteorológicos.
Según Gómez, se ha podido comprobar que la mayoría de las hermandades han incrementado el número de nazarenos en los desfiles, mejorando la Semana Santa de 2019, y asegura que había ganas de ver salir a la calle la nueva imagen de Cristo Resucitado, que hoy por primera vez ha podido procesionar sobre el paso del misterio de la Coronación de Espinas.
El paso de Cristo Resucitado, cuya imagen data del año 2019 y es obra de Manuel Martín Nieto, ha sido llevado por 40 costaleros, más otros 14 que hacían los relevos. Junto al Cristo ha salido también el paso de la Virgen de la Alegría, con 30 costaleros más otros 4 para los relevos.
Sobre el hecho de que algunos pasos no se han podido sacar con costaleros, la presidenta de la Asociación de Cofradías de Ciudad Real recuerda que era un año complicado y a lo mejor ha habido costaleros que se han mostrado reticentes debido a la pandemia y han preferido no salir debajo de los misterios.
Por su parte, la alcaldesa de Ciudad Real, Eva Masías, ha manifestado que ha sido la Semana Santa de la recuperación y el reencuentro y ha mostrado su emoción por haber sido la primera semana grande en la que ha participado como primera edil.
Masías ha subrayado que las calles han estado llenas de gente y ha habido un respeto a la tradición y ha recordado que la Semana Santa, declarada de Interés Turístico Nacional, es un motor económico para la capital.
