En un escrito remitido al Cabildo Prioral, la Hermandad recuerda que en anteriores ocasiones ya se había realizado la bajada de la imagen de la patrona de Ciudad Real para celebrar rogativas y una procesión extraordinaria en los año 1.918, con motivo de la Gripe Española, 1.944 para pedir por el Papa y por la Paz en plena Guerra Mundial, 1.954 con motivo de la clausura del Año Mariano, 1.955 para conmemorar el VII Aniversario de la Fundación de Ciudad Real, en 1.967 al ser coronada pontificalmente la imagen de la Virgen del Prado, y en 1.988 al cumplirse el noveno centenario de su aparición.
La Hermandad señala que la actual pandemia no ha podido ser erradicada totalmente, por lo que estima que sería procedente iniciar rogativas por intercesión de la Virgen para el cese del coronavirus.
El presidente de la Hermandad, Jesús González, reconoce en Onda Cero que no se esperaban la negativa del Cabildo, aunque respeta y acata la decisión.
La Hermandad de la Virgen del Prado pidió bajar la imagen de la Virgen el 4 de diciembre, celebrar un Triduo del 5 al 7 y organizar una procesión extraordinaria el 8 de diciembre por las calles de Ciudad Real.
Sin embargo, el Cabildo, en un escrito remitido a la Hermandad, considera la no urgencia de unas especiales rogativas, subrayando que fruto de la preocupación compartida por la pandemia ya se está rogando por la desaparición de este virus en las eucaristías celebradas en la Catedral.
El Cabildo señala que considera valiosas las propuestas que hace la Hermandad de la Virgen del Prado pero no comparte la necesidad urgente de una actuación tan extraordinaria que se sale del marco de los ordinario en la Catedral.
Según Jesús González, a la mayoría de los hermanos les hubiera gustado llevar a cabo las rogativas a la Virgen del Prado.
La Hermandad indica entender y respetar los sentimientos de tristeza y abatimiento que está generando la decisión del Cabildo, así como la confusión y desasosiego entre los fieles ante los anuncios de tales actos en otros muchos lugares.