Ciudad Real |
No han faltado las mascarillas, los geles y las distancias de seguridad entre las pocas personas que han acudido a la boda, que ha sido oficiada por la concejala de Participación Ciudadana, Sara Martínez.
Ha dicho que es importante que los contrayentes hagan del matrimonio un ejemplo de generosidad y de compromiso durante toda la vida.
Daniel y Guisem, una ciudadana turca, han mostrado su alegría por poder casarse, aunque hayan tenido que esperar más tiempo de lo previsto. La ceremonia se iba a celebrar en marzo, pero el confinamiento y el estado de alarma provocados por el coronavirus pospusieron la boda al 1 de julio.
Únicamente 10 personas han asistido a la ceremonia, que ha sido muy sencilla y ha durado menos de un cuarto de hora. Los novios celebrarán hoy un banquete.
Como la familia de la novia no ha podido venir debido al cierre de fronteras, la idea es que en septiembre Daniel y Guisem viajen a Turquía para organizar allí otra celebración con los familiares de ella.