El proyecto ha recibido el visto bueno de Patrimonio, ya que es un edificio protegido. La Casa de la Cultura se destinará a un uso educativo, tal y como se recoge en el convenio de cesión que firmó el consistorio con el propietario del inmueble, el Ministerio de Hacienda.
La concejala de Urbanismo, Raquel Torralbo, ha explicado que el objetivo será recuperar el trabajo del arquitecto que diseñó este edificio en 1.958, el daimieleño Miguel Fisac.
Un arqueólogo ha realizado un inventario de los elementos más significativos que se tienen que preservar. Será un edificio adaptado a la normativa actual pero recuperando los valores del proyecto de Fisac.
Se va a recuperar la fachada original, demoliendo la rampa. También se rehabilitará el sótano que se destinará a archivo municipal, igualmente se recuperará el muro acústico del salón de actos y la escalera de caracol que diseñó Fisac, así como los patios interiores.
Habrá dos accesos, aseos adaptados, la planta baja del edificio se destinará a exposiciones temporales y la planta alta será una zona diáfana, como proyectó Fisac, en la que habrá mamparas móviles para dividir el espacio con el fin de que se puedan celebrar varias actividades a la vez. También se mejorará la carpintería, la envolvente térmica del inmueble y el aislamiento del techo.
MASÍAS: "UN ESPACIO PARA LA CIUDAD Y PARA TODOS"
La alcaldesa, Eva Masías, ha manifestado que el objetivo es que, una vez se solventen todos los trámites, las obras comiencen a lo largo del año. Ha dicho que se va a recuperar un espacio para la ciudad y para todos.
Masías ha valorado el trabajo que está haciendo el Ayuntamiento para recuperar y rehabilitar edificios y proyectos que estaban atascados desde hace años, como el convento de Las Terreras, el centro social de Pío XII, la Plaza de Toros o los caminos del Vicario.
