Los estudiantes con los que ha podido hablar Onda Cero antes de que entraran en el colegio han dicho que vienen con ganas porque querían ver a sus amigos.
Todos tienen claro las medidas que hay que adoptar para garantizar la seguridad, como mascarillas, distancia de seguridad y lavada de manos. Nos dicen que no tienen miedo, aunque sí algo de respeto ante el Covid-19.
Los padres están entre expectantes y preocupados por el desarrollo del curso escolar. Dicen en Onda Cero que están un tanto intranquilos, algunos han llegado a comentar que envían a los niños a la “boca del lobo”, y pocos reconocían que no veían mal el inicio de las clases.
Los profesores se afanaban en situar en filas a los alumnos, dependiendo de las clases, manteniendo siempre la distancia de seguridad y con geles hidroalcohólicos en las puertas.
Se han establecido varias entradas en los colegios para evitar aglomeraciones, los más pequeños lo hacían por una puerta y lo mayores por otra diferente.