La Operación Montanco, como se le ha llamado desde la Guardia Civil, se inició como consecuencia de dos robos con violencia e intimidación con arma de fuego en dos estancos de la provincia, el primero en la localidad de Villahermosa y el segundo en Villanueva de los Infantes.
Ante la gravedad de estos hechos, la Guardia Civil comenzó una investigación de los hechos, desplazándose inmediatamente a los lugares donde se cometieron los hechos delictivos para poder recabar todas las pruebas e indicios, al objeto de llevar a cabo el esclarecimiento de los hechos e identificar al autor.
En muy breve espacio de tiempo y gracias a la colaboración ciudadana, se consiguió dar con la marca y modelo de vehículo que había utilizado el autor, para a partir de ese momento poder ubicar tanto al coche como a su usuario.
No fue fácil identificarlo y saber que era el verdadero autor de los hechos, ya que el vehículo estaba a nombre de otra persona que se lo había dejado al autor los dos días de los robos, sin tener conocimiento de lo que hacía con él cuándo se lo prestaba.
A partir de ese momento se empezó a vigilar al presunto autor a diario, con la intención de poder detenerlo cuando se dispusiera a llevar a cabo los robos, siendo finalmente detenido cuando realizaba tareas de reconocimiento en las localidades de Moral de Calatrava y Valdepeñas con la intención de cometer el tercer hecho delictivo.
El presunto autor y las diligencias policiales han sido puestas a disposición del Juzgado de Primera Instancia e Instrucción Nº2 de Valdepeñas (Ciudad Real).