Para lograr su objetivo, la investigada solicitó a su superior que emitiera varios cheques sin especificar el nombre del destinatario, alegando diferentes excusas.
También le facilitó a su jefe un número de teléfono móvil, indicándole que a través de él podía comunicar con la persona que gestionaba las licencias, siendo ella misma la propietaria de la línea y quien respondía a los mensajes haciéndose pasar por el supuesto técnico.
Además, alquiló un vehículo de renting a nombre de la empresa, falsificando para ello la firma del administrador y generando una deuda a la compañía por el impago de las cuotas que debía abonar.
La detenida ingresó los tres cheques emitidos, por valor de 40.000, 32.550 y 8.550 euros, respectivamente, en tres cuentas diferentes de las que era titular así como en una cuenta a nombre de sus padres y empleó el dinero para cancelar tres préstamos bancarios, pagar varios embargos judiciales, comprar un vehículo a nombre de su padre y financiar diversas actividades de ocio.
Una investigación policial contra reloj para recuperar el dinero estafado
El administrador de la empresa comenzó a sospechar cuando la empleada le solicitó otros 60.000 euros, por lo que puso los hechos en conocimiento de la Policía Nacional. A raíz de la denuncia se inició una investigación contra reloj para esclarecer los hechos y recuperar el dinero estafado.
El mismo día de la denuncia se consiguió el bloqueo preventivo de las tres cuentas utilizadas para ingresar los cheques, se logró evitar la entrega del vehículo que había comprado a nombre de su padre, la cual estaba prevista para ese mismo día.
También se pudo recuperar el dinero que había abonado para la compra del mismo y se procedió a la detención de la presunta autora.
En total, se han recuperado 20.430 euros, se intervino el vehículo alquilado por la detenida a nombre de la empresa y se incautó diversa documentación en el registro efectuado en su domicilio.
A la detenida se le imputan los delitos de estafa, falsedad documental y usurpación de estado civil. Sus padres fueron oídos en declaración como investigados no detenidos por la presunta comisión de un delito de blanqueo de capitales, en relación con el dinero ingresado en la cuenta bancaria que titularizan con su hija, el pago de uno de los préstamos y el vehículo comprado a nombre del padre