Según ha informado la Policía Nacional, las informaciones recabadas por este cuerpo de seguridad el pasado verano así como las posteriores diligencias policiales, permitieron verificar la existencia de un nuevo punto de distribución de sustancias estupefacientes a las afueras de la localidad.
La investigación se centró en cuatro personas, que carecían de antecedentes penales previos y operaban con absoluta cautela y discreción tanto en la guarda de las dos viviendas como a la hora de la venta final de la droga al consumidor.
Finalmente, la Policía Nacional procedió a la entrada y registro de los dos inmuebles así como a la detención de estas cuatro personas como responsables de un delito contra la salud pública.
También se decomisaron varias plantas de marihuana en máximo desarrollo de crecimiento, útiles de elaboración y un total de 2.700 gramos de cannabis sativa dispuesto para su venta.