La noticia ha corrido por las redes sociales, donde se puede ver a los cuatro felinos en una toalla. Andreu califica de desalmada a la persona que dejó abandonados a estos animales recién nacidos.
Esta vecina de Valdepeñas lleva 19 años dedicándose a cuidar y acoger animales abandonados, heridos o maltratados. No entiende estas actitudes y en el caso de los gatos aconseja esterilizarlos para que no ocurran estos lamentables hechos.
En su casa tiene 26 gatos y 3 perros, a los que se han sumado otros 15 gatos más que fueron abandonados e incluso alguno apareció en la puerta de su domicilio.
Asegura que durante estos últimos años ha visto de todo, gatos negros crucificados o colgados de los árboles, o animales que han estado a punto de ahogarse porque fueron abandonados por sus dueños.
Mari Andreu quiere dejar claro que ella no recibe ningún tipo de ayuda para cuidar de los animales, su objetivo es darlos en adopción, y remarca que le produce satisfacción ayudar a cualquier animal que tenga necesidades.