La Asociación de Dulcineas y Damas de Ciudad Real ha sido la encargada de portar la imagen de la virgen en el primer tramo del traslado, desde San Pedro hasta la calle Obispo Esténaga, donde miembros de la Hermandad del Silencio han tomado el testigo.
Entre las costaleras de la Asociación estaba también la alcaldesa, Eva Masías, ella fue Dulcinea, y ha manifestado que está contenta y orgullosa de la afluencia y de cómo se ha cogido la vuelta de romería tras la pandemia.
Según Masías, es una romería un poco más especial ya que los dos años anteriores no se pudo celebrar por culpa del covid y ahora se retoma la tradición, "esto es convivencia y se hace ciudad".
La primera edil ha pedido a la Virgen de Alarcos salud, "que nos proteja y que desde el cerro nos mire y nos tenga presentes".
Más tarde, ya en la iglesia de Santo Tomás de Villanueva la imagen de la Virgen de Alarcos es llevada por una reata de mulas de Tomelloso hasta la Finca “Las Barracas”. Desde aquí, los jóvenes de la pedanía de Valverde suben a hombros la imagen hasta la ermita.
Una vez en el templo, se celebra una ofrenda de flores a la copatrona de Ciudad Real y varios grupos folclóricos bailarán en su honor.
Mañana lunes, fiesta local en Ciudad Real, a las 8:00 horas tendrá lugar el rosario de aurora y después la Federación de Peñas ofrecerá mistela y pastas de té.
Después, a las 11:00 horas se celebrará la función religiosa en la Ermita de Alarcos y la posterior procesión.