En rueda de prensa tras un nuevo Consejo de Gobierno extraordinario, han dado los detalles del nuevo decreto que regirá a la región a partir de esta medianoche, un conjunto de medidas que requiere "un cambio de normativa importante", según García-Page.
No se admitirá el consumo en barras de bar, el aforo será 75% en interior y cien por cien en el exterior excepto en municipios que requieran medidas más restrictivas. Además, el número de comensales se eleva hasta 10 personas tanto en interior como en exterior.
Uso de la mascarilla obligatorio, limpieza en locales, higiene personal, ventilación de espacios, prohibición de venta y consumo de alcohol cuando los bares estén cerrados entre la 1.00 y las 6.00 horas o cien por cien de aforo en lugares de culto son otros extremos recogidos en el decreto que entrará en vigor. En cuanto a las reuniones familiares, se recomienda que en domicilios no exceda de los convivientes.
Espectáculos taurinos al 75% de aforo; igual que gimnasios, salas de juego, mercadillos, bibliotecas, museos, cines, teatros, museos o piscinas.
Se abrirán campamentos infantiles hasta 250 personas, según ha apuntado Fernández Sanz, quien añade que velatorios podrán tener hasta a 30 personas en interior y 50 en exterior.
En cuanto a bodas, bautizos y comuniones, 50% de aforo hasta 150 personas en interiores, y 250 en exterior, al 75% como máxima. Comercios minoristas pueden llenar al 100%, que se reduce al 75% en centros comerciales. Sobre los festejos populares, se está a expensas de lo que se decida en el seno de la FEMP, y el presidente castellanomanchego plantea que se puedan celebrar al 75 por ciento.
LAS LIMITACIONES SERÁN AHORA "UNA EXCEPCIÓN"
"Las limitaciones, las condiciones, van a ser ahora la excepción", ha dicho, cuando antes eran "la regla", ha dicho García-Page si bien "no es conveniente alimentar especulación en España para entrar en confusiones sobre qué es lo mejor".
Teniendo en cuenta que "no se puede pasar de cero a cien" y pidiendo a la ciudadanía "evitar el precipicio", ha indicado que esta normativa está pensada "para hacer un descenso de las limitaciones de forma progresiva, ponderada, proporcionada, de acuerdo con los datos y de acuerdo con la realidad".
Por tanto, este decreto será "anti vértigo", permitiendo limitaciones y para recordar a la ciudadanía "que el virus sigue y que esto no puede significar a volver a antes de saber que había un virus". Un decreto que además será "flexible" y será revisado "cada siete o catorce días" en función de los datos epidemiológicos.
FIN DE LA PERIMETRACIÓN
Una de las medidas adoptadas, ha recordado, pasa por levantar el cierre perimetral de la Comunidad Autónoma, toda vez que sin estado de alarma no tiene garantía jurídica. Este escenario sin estado de alarma requiere, ha recordado, escuchar a los expertos jurídicos.
Tampoco habrá toque de queda, pero se mantendrán algunas restricciones donde la Comunidad Autónoma sí puede actuar. Así, será obligatorio usar mascarilla y se mantendrán restricción de horarios en hostelería, --"los más flexibles de España"--, llegando incluso a una hora pasada la medianoche en el caso de las terrazas.
Este contexto provocará que la región haga un "análisis minucioso" en una primavera donde se recuperarán "romerías, fiestas, comuniones", y en definitiva extremos que, junto a la llegada de los días más largos, se recuperará mucha actividad.
Todas estas medidas significarán que "si hay que tomar alguna decisión localizada o sectorializada", así se hará, con niveles "muy elementales de alarma" para poder delimitar localidades o espacios territoriales concretos.
En todo caso, se va a aumentar el trabajo de rastreo en la Comunidad Autónoma, tal y como ha apuntado García-Page.
"NO PRESCINDAMOS DE LA PRUDENCIA"
García-Page ha apuntado que a partir de esta medianoche se pasará del "estado de alarma" al "estado de prudencia", por lo que ha pedido no "cambiar la sensación" social sólo por el hecho de que decaiga el amparo legal de los últimos meses.
"No podemos prescindir de la prudencia. Va a ser importante en próximos meses y seguramente lo será hasta que haya un tratamiento definitivo al COVID", ha alertado el líder del Ejecutivo regional, quien ha querido dar las gracias a todos sus vecinos "y a todo el país", por "atender, escuchar, por hacer un esfuerzo por informarse".
Su Gobierno, ha dicho, es "muy consciente" de que sus decisiones afectan al día a día de los ciudadanos, ante lo que ha reiterado su agradecimiento por lo que entiende es una "inmensa comprensión social" y con un nivel estadístico de apoyo a las decisiones que hay que celebrar.
Por ello, ha dicho, es importante que la sociedad de Castilla-La Mancha "tenga claro que hay dirección, fundamentos, que todas las decisiones que se toman están basadas en datos, en argumentos y en principios claramente técnicos", así como en "valores colectivos".
En este punto, ha aseverado que ninguna de las decisiones tomadas desde su Ejecutivo ha sido "fácil" ni "grata", ya que han "interrumpido la vida diaria", han afectado a la convivencia y hasta han "interrumpido la dinámica económica".
La realidad ahora es que "todo el mundo sabe qué consecuencias trae el virus", y sabe "de manera detallada y milimetrada cuáles son las medidas de prevención que hay que tener".
"Ahora que vemos la luz al final del túnel y sabemos que después de este túnel no va a venir otro, nos importa que la ciudadanía esté en armonía con las instituciones", ha afirmado García-Page.
DATOS ESTABILIZADOS
El consejero de Sanidad, Jesús Fernández Sanz, ha celebrado la buena marcha de los datos epidemiológicos, "estabilizados a la baja", una situación "buena" y en definitiva la que "se ha venido buscando" ante una cuarta ola que ha sido "menos llamativa" que las anteriores.
Hay unas 350 personas hospitalizadas por COVID y 80 más en Unidad de Cuidados Intensivos, datos que "distan mucho" del pasado y que permiten "tomar decisiones" más amables.
En el caso de los servicios de urgencias, ha apuntado como dato que se ha recuperado la normalidad en cuanto a su funcionamiento en comparación con tiempos pre COVID.
El 35% de la población regional, además, ya ha recibido alguna dosis de la vacuna, y cerca del 16% han completado la pauta, otro extremo que permite levantar algunas restricciones.
Los mayores de más de 80 años están prácticamente vacunados al cien por cien; entre 70 y 79 años llegan al 96% con alguna dosis y el 37% con pauta completa; entre 60 y 69 años el 76,5% tiene una dosis; y entre 50 y 59 años, la tasa llega al 16%. Esto hace que el 86% de mayores de 60 años tengan, al menos, un pinchazo administrado.