En colaboración con Protección Civil, Policía Local, Cruz Roja y Cáritas, este protocolo, que según ha señalado la concejala de bienestar social, Matilde Hinojosa, se activa cuando las condiciones meteorológicas son adversas, tanto en invierno como en verano, tiene como objetivo último que “las personas que están en la calle conozcan los recursos que tienen a su disposición para, de forma voluntaria, dejar atrás esa situación”.
En estos momentos, según señalaba Luis Sendarrubias, de Cruz Roja, unos voluntarios salen cada día a la calle en busca de estas personas, “unas 14 o 15 en estos momentos”, a las que “además de un bocadillo, se les ofrecen las plazas que tienen a su disposición para que no duerman en la calle: 3 en el Centro Jericó de Cáritas, y 10 en el Centro Municipal de la calle Borja”.
Las 3 plazas de Jericó, destacaba Chelo Almodóvar, “pueden ser más si el centro no está lleno”.
Por su parte, la coordinadora de la Agrupación de Protección Civil, Rosa Muñoz, asegura que “además de atender a estas personas, los voluntarios de este cuerpo les hacen un control sanitario cada 20 días para vigilar su estado de salud”.