Como novedad este curso se han establecido grupos de convivencia estables, las conocidas como “aulas burbuja” en las que cada grupo “va a convivir exclusivamente con los alumnos y alumnas que están en esa clase y sus educadoras, de modo que no habrá interacción entre las distintas clases, tampoco con el resto de personal, ni siquiera entre las distintas educadoras de distintas aulas” explicaba la edil.
Una medida también establecida en el patio durante el recreo, que se ha delimitado por pequeñas vallas, y en la zona del comedor, donde además accederán en diferentes franjas horarias.
Con flechas se han marcado itinerarios seguros de entrada y de salida al centro para dejar a los niños en sus aulas. Se han ampliado los horarios de entrada, permitiendo que la entrada sea más escalonada y guardando las distancias de seguridad. “Cuando el papa o mamá llega al aula por el itinerario marcado le esperará una educadora quien recogerá todas las pertenencias del niño, incluido el abrigo que se guardarán en una bolsa que se depositará también en un espacio seguro donde no haya contacto con las otras cosas del resto de alumnos y alumnas, y ya en el aula se le pondrá al niño o la niña su batita y zapatos para estar en el centro”. Los zapatos se quedarán fuera del aula. Una vez que todos los padres hayan salido del centro, una de las trabajadoras desinfectará toda la zona.
La temperatura se tomará a todos los niños, a los que se prohíbe ir con fiebre al centro, pero si se diera el caso dentro del propio centro, según explicó Hinojosa, existe un protocolo que establece el aislamiento del menor con su educadora en un aula específica preparada para ello, y su atención por parte de una enfermera pediátrica asignada por el Centro de Salud Pio XII, procediendo a informar a los padres, activando todo el protocolo de Sanidad, y adoptando todas las pautas que les marquen en ese momento.
13 personas prestan sus servicios en esta escuela municipal, que cuenta con dos educadoras por aula, junto a la directora del centro, y la trabajadora de usos múltiples que es la encargada de ir desinfectando las salas, y subsanando las diversas incidencias que se producen a lo largo del día, una labor que además se reforzará con la contratación de otra persona, que apoyará estas tareas, junto a la desinfección de baños.
De todas estas recomendaciones y medidas se ha informado a los padres por escrito. La Escuela de Infantil Municipal de la Granja abrirá sus puertas el próximo lunes, 14 de septiembre, con una capacidad del 75%, (34 plazas) y mantiene el aula matinal que comienza a las 7.30 horas hasta las 9:00 horas, siguiendo los mismos protocolos.