Los ladrones seleccionaban los establecimientos que permanecían abiertos durante el estado de alarma como gasolineras, panaderías, supermercados y tiendas de 24 horas.
Los tres detenidos, según ha informado la Guardia Civil, actuaban tapados con mascarillas, guantes y gafas de sol. Una vez en el interior del local, amenazaban a los empleados con un cuchillo jamonero que llevaban oculto entre sus ropas para llevarse la recaudación del día. Posteriormente, emprendían la huida a pie.
En uno de los robos, en Campo de Criptana (Ciudad Real), llegaron a sustraer 1.800 euros de la caja registradora y las máquinas recreativas de un bar.
En total, la Guardia Civil les imputa nueve robos cometidos en Campo de Criptana, Tomelloso y Socuéllamos, en la provincia de Ciudad Real. Los detenidos residen en Campo de Criptana, Tomelloso e Ibros (Jaén).
En los registros practicados, la Guardia Civil ha encontrado las prendas que los autores utilizaban en sus atracos. También se han recuperado 490 euros del dinero robado.
Las diligencias instruidas han sido entregadas en el Juzgado de Instrucción número 2 de Tomelloso, número 1 de Alcázar de San Juan y en el de Instrucción de Baeza.