Los detenidos eran los ocupantes de los dos vehículo implicados en el atropello y se les imputan los delitos de homicidio por imprudencia --al autor material del hecho-- así como un delito de encubrimiento a los dos ocupantes del segundo turismo.
La Policía Nacional, según ha informado en nota de prensa, inició la investigación tras el hallazgo de un cuerpo sin vida en la madrugada del pasado 7 de julio en la avenida Puente de Retama de la capital.
Las primeras indagaciones concluyeron que en el atropello mortal participaron dos vehículos, que huyeron del lugar tras comprobar que la víctima, de 37 años de edad, había resultado fallecida.
Las pruebas recopiladas por los especialistas de Policía Científica durante la inspección que realizaron en el lugar del atropello, junto con el análisis de las grabaciones de las diferentes cámaras de seguridad y las llamadas a emergencias inmediatamente después del suceso, permitieron a los agentes identificar los dos vehículos fugados tras el impacto: una furgoneta de grandes dimensiones que conducía el presunto autor del atropello, acompañada por un turismo en el que viajaban los otros dos detenidos.
Los investigadores pudieron verificar que tanto la furgoneta que atropelló al peatón como el turismo que la acompañaba, se dirigieron de madrugada a un lavadero de coches donde limpiaron los exteriores y bajos del vehículo minuciosamente para eliminar así cualquier prueba que pudiera incriminarles en los hechos.
Sin embargo, una exhaustiva inspección posterior permitió localizar restos de vestigios biológicos en la furgoneta que se correspondían con el perfil genético de la víctima.
Al conductor de la furgoneta y autor material del atropello se le imputa un delito de homicidio por imprudencia, y a los ocupantes del segundo vehículo sendos delitos de encubrimiento.