Elena Tamurejo, alcaldesa de El Robledo ha confirmado a Onda Cero que el Ayuntamiento ha decidido suspender el tradicional chapuzón que los vecinos de este municipio protagonizan cada 31 de diciembre para despedir el año, desafiando las bajas temperaturas del río Bullaque debido al incremento de contagios por covid-19 y a la escasez de agua de su cauce.
Se han suspendido todas las actividades previstas para despedir el año.
La alcaldesa de El Robledo espera que el próximo año puedan cumplir con esta tradición que se viene celebrando desde el año 1995 celebrando la vuelta del agua al caudal del rio tras la sequia de los años noventa.