Clases de refuerzo en Valverde gracias al legado millonario de doña Virginia
Valverde de Júcar ofrecerá este verano clases educativas gratuitas a los niños de la localidad, para reforzar los contenidos tras la suspensión de la actividad educativa presencial por la pandemia de la COVID-19. El proyecto lo impulsa la Fundación Virginia Pérez Buendía, que gestiona el patrimonio de la anciana millonaria que legó su fortuna a la educación de los niños del pueblo. Se puso en marcha hace unos cinco años y, desde entonces, decenas de chavales de esta localidad conquense han recibido becas educativas gracias a su buena obra.
Así lo ha explicado, en declaraciones a Onda Cero Cuenca, Juliana Bautista , alcaldesa de Valverde y presidenta de la Fundación que lleva el nombre de esta vecina soltera y sin familia directa que falleció en 2014, a los 86 años, en su vivienda ubicada cerca de la Carrera de San Jerónimo en Madrid.
Sin embargo, dejó toda su herencia a asegurar la educación de los niños de su pueblo, de unos 1.200 habitantes.
Murió sola y nadie se percató de su muerte hasta semanas después. Ahora, su patrimonio está arrendado y con esa cantidad es posible hacer frente a todos los gastos educativos, como las clases de inglés que reciben cada curso más de un centenar de niños de esta localidad conquense.
Este verano se completan con esas clases de refuerzo, según ha explicado la alcaldesa, quien ha adelantado que contratarán a varios profesores.
Se impartirán en un aula polivalente del Ayuntamiento, que dispone de tres espacios para garantizar la distancia de seguridad.
El próximo mes de julio se renovará el patronato de esta fundación benéfico-educativa, de la que forman parte, además de la alcaldesa, el párroco, el juez de paz y otras cinco personas.
Fábrica de Harinas de Valverde de Júcar que perteneció a la familia de Virginia Pérez Buendía | ondacero.es
Aunque nunca ha trascendido el patrimonio exacto podría sumar cerca de tres millones de euros. Legó dinero en efectivo y numeroso capital mobiliario. Actualmente pervive una cartera con un millón de euros en acciones bancarias.
Virginia Pérez Buendía perteneció a una familia que arrancó con un molino de harina y actividades agroalimentarias. Poco a poco su patrimonio fue creciendo.