Según la organización agraria, los daños ocasionados en los árboles, entre un 60 y 70 por ciento, requerirán de importantes inversiones en poda y tratamientos fitosanitarios para su recuperación, que podría durar cinco o seis años.
Así lo ha constatado Asaja tras la visita que ha realizado a la zona su secretario general, Manuel Torrero, quien ha solicitado ya un encuentro con el presidente de la Diputación de Cuenca, Álvaro Martínez Chana, para trasladarle la preocupación por la situación y para plantearle su colaboración en un plan de recuperación del olivar.
Torrero ha calificado la situación de “preocupante” y ha asegurado que, durante los próximos años, los agricultores “tendrán que invertir en poda o en tratamientos fitosanitarios para recuperar los olivos, porque, a pesar de su aspecto, no se han perdido totalmente”.
Cooperativas afectadas
Así, ha recordado que en la Alcarria de Cuenca los agricultores han hecho en los últimos años grandes inversiones para modernizar este cultivo y la pérdida de producción durante los próximos años va a tener un efecto "muy negativo", no sólo para la renta del agricultor, sino también para las cooperativas de la zona que van a tener una reducción de liquidez importante.
En este sentido, el plan de recuperación que se planteará a la Diputación también contempla posibles líneas de apoyo a estas cooperativas alcarreñas que han hecho importantes inversiones en los últimos años y que esta pérdida de producción puede llevarlas a una falta de liquidez o a la quiebra.
Olivar ecológico
Por lo que respecta al olivar ecológico, Torrero ha avanzado que se va a solicitar a la Consejería de Agricultura de la Junta una consideración especial a aquellos agricultores que tienen este cultivo, dado que en los próximos años la cosecha va a ser "escasa o nula" y no se les puede exigir la misma producción que en una situación normal para cumplir con los requisitos que establece el cultivo ecológico, entiende la organización agraria.
Según Asaja, el olivar de bajo rendimiento se ha convertido en la Alcarria de Cuenca en parte fundamental para la renta de los agricultores.
Así las cosas, algunos agricultores han optado por esperar a ver cómo se comporta la primavera y si la pluviometría y las temperaturas ayudan a la recuperación de los árboles.
Podas y tratamientos
Otros han comenzado por podar los árboles más afectados y han iniciado ya el tratamiento fitosanitario.
En este sentido, el secretario general de ASAJA Cuenca ha aconsejado iniciar el tratamiento de recuperación y estimulación del olivo “a través de la protección fitosanitaria para hacer frente a plagas enfermedades como el barrenillo".