El objetivo es poder adelantarse y lograr que las danas que en los últimos años están afectando gravemente a la provincia tengan los mínimos efectos posibles, ha indicado el presidente de la Diputación, Álvaro Martínez Chana.
Esta primera anualidad estará destinada a los pueblos de la provincia que han sufrido estos desastres en los últimos años y con el objetivo de seguir ampliándolos en los sucesivos ejercicios.
Los planes van a contar en su elaboración con la ayuda de la Empresa Pública de Gestión Ambiental de Castilla-La Mancha (Geacam), con la premisa clara de identificar los riesgos y los elementos que pueden provocar que una vez que se produzca el suceso sus consecuencias se vean agravadas en los pueblos.
Del mismo modo, se hará especial hincapié en las posibles respuestas y medidas que se pueden tomar una vez sucedidas ya sea en forma de planes de evacuación o inversiones, según determinen los técnicos correspondientes, ha precisado la Diputación en una nota de prensa.
Belmonte, Buenache de Alarcón, Mira y la Serranía Baja han sufrido inundaciones en los últimos años.