Alquilar o comprar un inmueble no es tarea fácil, advierte este colectivo, dado que en la mayoría de las localidades no existe oferta, situación que se suma a que las viviendas disponibles no reúnen los mínimos requisitos o los propietarios tienen temores para culminar un arrendamiento.
Es decir, que aunque existen muchas viviendas vacías, no están adaptadas paras las necesidades actuales.
Algunas viviendas son muy grandes, para las familias numerosas de antaño, pero no para las realidades actuales, y muchas además no tienen calefacción.
A estos problemas se suma que las ventas tampoco son viables por el valor sentimental (los propietarios no contemplan esta opción), problemas de herencias que hacen interminable la venta o, simplemente, muchas constituyen segundas residencias que nadie quiere dejar de disfrutar, aunque solo sea para pasar un par de días al año, precisan.
La aprobación de un plan de delimitación de suelo urbano o la resolución de una licencia de obras exigen los mismos trámites independientemente del número de habitantes.
Sin embargo, los recursos técnicos y económicos que disponen los ayuntamientos pequeños para su ejecución no son comparables a los de una gran ciudad.
A ello se une que las empresas del sector inmobiliario no suelen llegar al medio rural.
De esta forma, al interesado no le queda más remedio que ir al pueblo y preguntar a los pocos o muchos vecinos que se encuentre ese día por la disponibilidad de vivienda en el mismo.
Tragacete
Sin embargo, algunos Consistorios sí trabajan en este sentido.
Manifiesto por Cuenca pone como ejemplo al Ayuntamiento de Tragacete, que está rehabilitando el antiguo Cuartel de la Guardia Civil, donde ya ha conseguido alojar al menos a dos familias.
Similar el caso de Gascueña con la rehabilitación de sus antiguas escuelas para tal fin.
En otras comunidades autónomas como la de Aragón algunos Grupos de Acción Local han emprendido campañas publicitarias como la desarrollada por Adri Jiloca Gallocanta con el eslogan "Abre tu casa, tu pueblo lo necesita".
Dicha campaña responde a la necesidad de vivienda en venta y, sobre todo, en alquiler que había en el medio rural turolense y que se pudo cuantificar gracias a la investigación de este grupo.
En otros países como Francia o Alemania se grava con impuestos elevados aquellas viviendas ruinosas o solares abandonados, con el objetivo de favorecer la venta.
Oficina de Fomento de la Vivienda Rural
Por ello, Manifiesto por Cuenca ha destacado la creación de la Oficina de Fomento de la Vivienda Rural, plasmada en la futura Ley de medidas económicas, sociales y tributarias frente a la despoblación y para el desarrollo rural.
Así, se encargará de gestionar una bolsa de vivienda rural que permitirá conectar a las personas demandantes de vivienda con la oferta existente.
Pero, además, se considera necesario la adaptación de la legislación urbanística a las características del medio rural estableciendo baremos en función del número de habitantes y dotando a los ayuntamientos del personal y formación necesarios para la tramitación de los expedientes urbanísticos, además de establecer una línea de ayudas para la reforma o construcción de nueva vivienda en municipios pequeños para incrementar la oferta.
Esta asociación ha recordado que esa fórmula ya se puso en funcionamiento en otras ocasiones para satisfacer la demanda.
En el último siglo se construyeron cientos de viviendas para albergar a la población que trabajaría en la puesta en marcha de nuevas empresas o infraestructuras, como Puente de Vadillos o el poblado de Lucas Urquijo en el Salto de Víllora.