Así lo ha indicado, en declaraciones a Onda Cero Cuenca, Rodrigo Molina, delegado de Desarrollo Sostenible en la provincia.
En el incendio de Cañamares, que se declaró el pasado 10 de agosto, ardieron un total de 240 hectáreas, mientras que 90 fueron las arrasadas en Carrascosa.
En ambos casos el Plan Infocam mantuvo durante algunas horas el nivel 1 de peligrosidad.
Según la Junta, los rayos están detrás del 25 por ciento de los fuegos registrados esta campaña en Cuenca.
Este fin de semana se han registrado dos incendios forestales: en Villalba de la Sierra y Buendía.
En los dos casos quedaron controlados rápidamente.