Por un lado, la plataforma conquense considera que el Consejo Internacional de Monumentos y Sitios (ICOMOS) está "politizado" y "sometido", y es por ello que ratifica un proyecto que ha vuelto a tildar de "disparate".
Es más, creen que la idea de salvar un desnivel de casi 60 metros en dos tramos es un proyecto "inútil, caro y agresivo y negligente".
Así, proponen que la partida presupuestaria que se quiere destinar a este proyecto (9, 2 millones de euros sólo en los presupuestos regionales de la Junta para 2022) vayan a eliminar "cableado, contenedores, señales y elementos nocivos" del paisaje urbano.
Por su parte, el portavoz del PP en el Consistorio conquense, José Ángel Gómez, ha advertido que la construcción de esas escaleras mecánicas puede conllevar grandes costes de mantenimiento, de hasta 120.000 euros anuales.
El edil popular ha recordado también que la anualidad anterior ya se presupuestaron 5 millones de euros y se pregunta dónde está ese dinero.
Ayuntamiento de Cuenca
El alcalde de Cuenca, Darío Dolz, ha mostrado por su parte su satisfacción por el informe dado que "despeja el camino para seguir avanzando en la propuesta de accesibilidad”.
Dicho documento recalca, según ha informado el Consistorio en una nota de prensa, que “el proyecto propone una mejora de la conectividad de esta zona de la ciudad”, aportando “la posibilidad de realizar un recorrido peatonal adaptado que permite tener unas vistas privilegiadas a la hoz del río Huécar”.
Eso sí, incluye una serie de recomendaciones que para Dolz son “lógicas y coherentes, y perfectamente asumibles, pues no alteran el conjunto del proyecto”.
Por ejemplo, el documento señala que “podrían reducirse los miradores panorámicos de la zona alta, dejando la ladera completamente cubierta por la vegetación”.
Recomienda también “aumentar la cantidad de elementos vegetales, reduciendo las zonas pavimentadas” y que “la zona verde preexistente siga percibiéndose como tal tras la ejecución del proyecto”.
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